domingo, enero 15, 2006

Contestando al primer ministro marroquí Agosto 2001

          CONTESTANDO AL  PRIMER  MINISTRO  MARROQUÍ  (opinión)



En  “El País”  del día  13 de Agosto  del corriente  he podido leer un articulo de opinión del  primer ministro marroquí en el que, como siempre, barre para su casa, como es lógico.  El tiene que desempeñar su papel como Presidente del Consejo de Ministros de Marruecos, dirigiendo y buscando para su pueblo lo mejor, que es lo que yo, personalmente, como buenos vecinos  le deseo, mas a su pueblo que a el, obviamente.  Pero lo que no le puedo permitir, con todo el respeto del mundo que para eso resido en un país democrático donde se respetan los derechos de opinión de cada ciudadano, y lo mas importante, los derechos humanos; que  lo comprueben con sus compatriotas que desembarcan de las mal llamadas pateras en nuestras playas, donde muere gente que  hasta el momento su gobierno no hace nada para remediarlo y a muchas personas de esta parte del Estrecho se nos cae el alma de pena.  
Los diarios Libération y  Al Bayane; este último del Partido del Progreso y el Socialismo,  (PPS), según  El País de 23 Agosto dice entre otras cosas que, “.... España trata de endosar su responsabilidad a otros. Marruecos hace lo que puede con los medios que tiene. Las arcas públicas han costeado, sacrificando otras prioridades nacionales,  y la guinda del pastel  lo  dice Libération: España ha olvidado la ayuda al desarrollo que Marruecos  necesita y esa es la causa de la salida masiva de inmigrantes clandestinos”.   En mi ciudad, Melilla,  a eso  se le llama tener la cara de cemento armado, mas bien por lo duro que resulta el cemento con las vigas de hierro, que sirven para el sostenimiento de los edificios.
Pero como ese tema ya lo habrán tocado su embajador  (perdón, el segundo señor Moslih que llegó con media hora de retraso, el primero estaba de vacaciones),  en  mi país, llamado a consultas  por mi gobierno el día veintiuno del corriente mes de Agosto. Que palabra mas original: consulta,  como si se tuviera que consultar algo al respecto,  para decir, muy finamente que están hasta los cojones (voz del pueblo), que le van a llamar la atención de algo feo que está ocurriendo en las mismas conniventes narices y jetas  de su policía    en sus playas  acabando con muertes innecesarias en las nuestras.  
Adolfo Llanos Alcaraz  en  “La Campaña de Melilla 1893-1894”, y ya han pasado 105 años, dice: “ Hace falta conocer a los moros, haberlos tratado de antiguo, ser siempre y a toda hora y en todo momento, severísimos con ellos, no dejarles pasar una sutileza, ni una evasiva, atajarlos, envolverlos en suma ante el irresistible ímpetu de la gravedad de los asuntos.   No es posible haya negociadores mas a propósito que los moros para alargar las conferencias, para evitar lo que no les acomoda, para mostrarse convencidos y luego volver a la cuestión y para repetir sin cansarse sus argumentos, por mas que se los hayan destruido “.   Cuando lean esto de Llanos Alcaraz  me parece que les vendrá a la memoria el último Tratado de Pesca entre la Unión Europea  (España)  y Marruecos  donde todo ha acabado en agua de borrajas y varios cientos de barcos amarrados en sus puertos.
Yo creo que  esto es como dos vecinos que de vez en cuando se tiran los trastos a la cabeza y en otros momentos se dan besos a dentelladas.  Pero siempre hay uno que  transige casi siempre, como  cuando un Hermano mayor quiere abusar del menor  (1975 muerte de Franco y Marcha Verde) o el  Hermano menor, como es mas chico, y sabe que su Hermano mayor le va a ayudar, abusa todo lo que puede y mas (Tratado de Pesca y pateras mafiosas a gogó y encima que el Hermano mayor  apechugue con  ayudas).  Todo eso lo vamos a dejar para los diplomáticos que para eso cobran sus buenos sueldos y han estudiado el arte de decir Digo donde quieren decir Diego.  Lo mío y lo de todos los melillenses y ceutíes es lo que se refiere al final de su articulo: “Tratar sobre el futuro de Ceuta y Melilla”.  
Como yo soy un ciudadano normal,  y los que leen esto también son gente que al pan le llaman pan y al vino, vino  (un castizo muy cachondo le llamaba mostagán); voy a intentar explicarme lo mejor posible con respecto a  “Tratar sobre el futuro de mi ciudad” con nuestro vecino.
Yo no entiendo qué se debe tratar con un vecino los problemas internos de tu casa a no ser que se trate de  ayudarse en caso de una enfermedad (paritorios de mujeres fronterizas en el Comarcal de Melilla), limpieza de escaleras,  blanqueo del edificio y lo mas importante, respetarse los dos y cada uno en su casa y Dios en la de todos.  Melilla, ciudad española como Alcalá de los Gazules o Vigo; mas bien deben, los dirigentes políticos de Marruecos, acabar con la dictadura encubierta que padece el pueblo y dejarse de zarandajas.  
Yo no soy ningún experto en  todos los tratados que España ha tenido con Marruecos, pero si se de un articulo  que se firmó en   Tetuán el 24 de Agosto de 1859 reinando en Marruecos Muley Abderrahman Ben Hixen y en España  Isabel II  y mas o menos dice así: S. M. El Rey de Marruecos, deseando dar a S. M. C.  Una señalada muestra de los buenos deseos que le animan, y queriendo contribuir en los que de el dependa al resguardo y seguridad de las plazas españolas de la costa de Africa, conviene ceder a  su majestad católica, en pleno dominio y soberanía, el territorio próximo ala Plaza de Melilla, hasta los puntos mas adecuados para la defensa y tranquilidad de aquél presidio.
En el articulo 2º dice:  Los límites de esta concesión se trazarán por ingenieros españoles y marroquíes.  Tomarán estos por base de sus operaciones para determinar la extensión de dichos límites el alcance de cañón de 24 de los antiguamente conocidos.
Mas tarde, en Marzo de 1860 cuando O’Donell  y Muley Abbas firmaron el Armisticio, dando por terminadas las hostilidades, firmaron otro Tratado  de nueve artículos y en   el 3º dice: S. M. El Rey de Marruecos ratificará a la mayor brevedad posible el convenio relativo a las Plazas de Melilla, el Peñón de Alhucemas que los Plenipotenciarios de España y Marruecos firmaron en Tetuán el 24 de Agosto de 1859.   Sobre el armisticio que O’Donell  firmó  con Muley Abbas  en Wad Ras se ve la dignidad de este como Califa y  lo magnánimo que fue nuestro general en la carta que le envía a nuestro presidente de Gobierno rebajando en 20.000.000 de duros la indemnización, no pareciéndole generoso para su Patria humillar a su enemigo, que si se reconoce vencido dista mucho de ser despreciable.
Yo creo que después de todo lo relatado solo me queda  desear que las enésimas conversaciones entre los políticos de ambos países lleguen a buen puerto.  
Que así sea y queden con Dios, paisanos.

                              Juan Jesús Aranda López
                                                    Málaga Agosto 2001


Publicado en “Melilla Hoy” el 22 de abril de 2001