A las víctimas del terrorismo 20/09/2001
A LAS VÍCTIMAS DEL TERRORISMO
Desde que leo este periódico a diario, aunque sea con un día o dos de retraso por culpa de la lejanía de las dos orillas, y también de Correos, me llevo cada disgusto que a veces me dan ganas de decir una barbaridad de la que mas tarde me arrepentiría.
Desde esta otra orilla, aunque parezca mentira, algunos melillenses también hacemos patria, no creáis que solo los políticos locales saben hacerlo, para muestra lean lo que sigue. Algunos tenemos la cabeza donde residimos pero el corazón lo tenemos siempre en Melilla y sus calles. Todo esto viene a cuento sobre el reconocimiento de la Ciudad de Melilla a la concesión de la medalla de oro de la ciudad a las víctimas del terrorismo y los del avión siniestrado en Málaga hace pocas fechas.
Un buen amigo de hace varias décadas, cuando me ve leyendo este periódico me dice que me estoy drogando con mi Melilla, pero cuando le pedí que leyera las páginas 4 y 5 del viernes 14 de este mes y me diera su opinión me dijo una cosa que de verdad les digo, sentí vergüenza ajena y un bochorno interior que se convirtió en una sensación de rabia profunda.
No entiendo la postura de esa gente (por los políticos de Melilla), me dijo, si aparentáis ser mas españoles que los de Avila o Castro Urdiales por vuestro hipotético abandono peninsular, cómo es posible que en una ciudad tan española, que siempre estáis pregonando esa españolidad a los cuatro vientos no se pongan de acuerdo un puñado de políticos que ganan esos sueldazos y comisiones, etc. . Como ya digo, me entraron ganas de llorar de rabia, y no tenía mas remedio que darle la razón y sentir vergüenza de que algunas personas, que debieran estar plantando pinos en Rostro Gordo o dirigiendo el tráfico (es un decir) estén gobernando mi ciudad. Qué pensaran de Melilla en el resto de España, qué dirán de los melillenses cuando sepan que un año mas, las víctimas del terrorismo se quedan sin su reconocimiento.
Uno de los políticos que ocupaba la poltrona que se la arrebató a otro con los votos de la censura que aun colea por ahí algo de ello, dijo que el actual, que también se la ha arrebatado a otro, ¡qué guirigay!; pues bien, dijo que el actual le espetó en su despacho que allí se hacía lo que a el le salía de los cojones. No me digan ustedes que la frase no es una pura filosofía dicha con toda la democracia del mundo, ...¡ por los cojones ¡ (como dice aquél que dijo el actual).
Leo también que el actual presidente lamentó lo sucedido por lo que implica de “daño a la imagen de la ciudad”. Yo le digo que el daño ya esta hecho cuando no han tenido esa inflamación escrotal que dicen que dijo él al no retomar entre todos la situación y ser mas humildes y olvidarse de la soberbia política de partido.
Mi amigo, que es un semanasantero malagueño de toda la vida, me animó a hacer varias pancartas bien grandes para cuando vengan las autoridades y desfilen, presidiendo la procesión, ya que el Ayuntamiento de Melilla es Hermano Mayor Honorario de la Cofradía de la Virgen de la Misericordia figurando el escudo de la ciudad en la parte frontal del palio. En la pancarta se podría leer lo siguiente: “Señor Presidente y demás políticos viajeros (lo de viajero sería cachondeo) de la Ciudad Autónoma de Melilla: Cuándo van a conceder la medalla de oro de su ciudad a las víctimas del terrorismo”. Una de las pancartas la sostendrían dos personas a pies firmes escuchando el Himno Nacional en la calle Ancha del Carmen, a la salida del Paso o Trono. Otra pancarta estaría situada en la Alameda Principal, junto al puente de Tetuán, otra a la entrada de la calle de Larios, la siguiente frente a la tribuna oficial para que todas las autoridades le pregunten a los políticos melillenses; los que se salen de la procesión para sentarse en la tribuna, qué es eso de la medalla de oro que dice esa pancarta. No vean ustedes la vergüenza que pasaría; todo un representante de una de las ciudades que constantemente nuestro vecino cuestiona su propiedad y nuestra españolidad y que no se pongan de acuerdo para una cosa tan importante como es la concesión de la medalla de oro de la ciudad a las víctimas del terrorismo. Otra pancarta la colocaría en la Tribuna de los Pobres en la calle de Carretería, donde todas las cadenas de radios y televisiones trabajan mas a gusto porque de tribuna no tiene nada, solo es una escalerilla de mármol que va desde el puente de calle Mármoles a la de Carretería, donde por tradición en Málaga, se sienta la gente con sillas particulares a ver sus procesiones mas a gusto que en ninguna otra parte, y también donde La Legión, con su marcialidad, hace las delicias del público cantando y tocando su himno legionario.
Yo no conozco personalmente a ningún componente del gobierno de la Ciudad Autónoma, solo de oídas y alguno que otro de vista; jamás he hablado con ninguno pero estoy seguro que ninguno sentirá lo que en estos momentos siento yo, y es rabia y perplejidad.
Como ya digo anteriormente los melillenses que residimos en esta otra orilla tenemos que sortear con la política de nuestro “amable” vecino y la desinformación a que nos tienen acostumbrados los gobernantes nacionales de turno y muchos de los locales, estos con sus peleas barriobajeras como la actual y siendo el debate, que no debiera ser tal, uno de los mas importantes de toda la legislatura, al menos eso es lo que a mi me parece.
Para terminar yo propondría que tanto, consejeros, viceconsejeros, comisionados y gente que pulula por el palacio de Enrique Nieto, fueran amas de casas normales y corrientes las que dirigieran la ciudad. Son las únicas que saben mas de economía que nadie; que se lo pregunten cuando van al mercado; las mas batalladoras en defensa de algo suyo, y no como algunos-muchos varones que cuando pillan la poltrona se tiran a la bartola toda la legislatura. Se pelean y discuten en plan sainete, cosas que en cinco minutos estarían listas si fueran mas ágiles y se dejaran de portavocías y demás zarandajas. La limpieza de la ciudad ya no estaría en entredicho, que si la ciudad está muy guarra, que si tal consejero no vale un duro. No crean que es una utopía, aunque como está el entramado político, desgraciadamente, si lo es. Está comprobado que tanto empresas privadas como comunidades de vecinos donde son mujeres las que las presiden funcionan de maravilla y no me digan que las amas de casa no son capaces de dirigir una ciudad como Melilla. Estoy seguro que las hay preparadísimas y locas por hacer algo por sus calles y barrios que muchos hombres no lo harían. Creo que la ciudad ganaría y a los actuales que gobiernan que se vayan cada uno a sus trabajos respectivos, así tal cual, pero no a la puta calle, como le dijo el “zar” de Marbella a un periodista: tú, a la puta calle. Solo me conformo conque se vayan y dejen a las mujeres gobernar, pero, repito, que sean todas amas de casa.
Juan J. Aranda
Málaga 20 de Septiembre de 2001
Publicado en “Melilla Hoy” el 29 de Septiembre de 2001
En el año 1985, cuando los sucesos de la plaza de España, escribí unos poemas en unos momentos de indignación que mas bien me produjeron tristeza que otra cosa.
Creo que alguna similitud tienen con la actualidad y dicen asi:
“A LOS POLÍTICOS DE MELILLA”
“Melilla vieja y joven,
eres ciudad mal gobernada.
Tus políticos gandilocuentes no te informan.
Son buscadores del voto, mientras piensan,
¿son galgos o podencos.
Y ellos, ¿son liebres o conejos.
También tienes otros políticos;
Estos son de babuchas blancas,
Arribistas y de nuevo cuño.
Españoles descafeinados los llamo,
Y con consignas del Alauita
Y de Madrid benefactor,
Van caminando lento
Pero seguros de su fin.
Tus grandilocuentes políticos,
Mientras, se besan a dentelladas.
¿Son galgos o podencos
y ellos ¿son liebres o conejos.
A todos los melillenses de buena fe les envio un cordial saludo y a algunos gobernantes, dice mi amigo, que los zurzan (con todos los respetos hacia los cargos que desempeñan).
Juan Aranda
Málaga 19 de Septiembre 2001
Desde que leo este periódico a diario, aunque sea con un día o dos de retraso por culpa de la lejanía de las dos orillas, y también de Correos, me llevo cada disgusto que a veces me dan ganas de decir una barbaridad de la que mas tarde me arrepentiría.
Desde esta otra orilla, aunque parezca mentira, algunos melillenses también hacemos patria, no creáis que solo los políticos locales saben hacerlo, para muestra lean lo que sigue. Algunos tenemos la cabeza donde residimos pero el corazón lo tenemos siempre en Melilla y sus calles. Todo esto viene a cuento sobre el reconocimiento de la Ciudad de Melilla a la concesión de la medalla de oro de la ciudad a las víctimas del terrorismo y los del avión siniestrado en Málaga hace pocas fechas.
Un buen amigo de hace varias décadas, cuando me ve leyendo este periódico me dice que me estoy drogando con mi Melilla, pero cuando le pedí que leyera las páginas 4 y 5 del viernes 14 de este mes y me diera su opinión me dijo una cosa que de verdad les digo, sentí vergüenza ajena y un bochorno interior que se convirtió en una sensación de rabia profunda.
No entiendo la postura de esa gente (por los políticos de Melilla), me dijo, si aparentáis ser mas españoles que los de Avila o Castro Urdiales por vuestro hipotético abandono peninsular, cómo es posible que en una ciudad tan española, que siempre estáis pregonando esa españolidad a los cuatro vientos no se pongan de acuerdo un puñado de políticos que ganan esos sueldazos y comisiones, etc. . Como ya digo, me entraron ganas de llorar de rabia, y no tenía mas remedio que darle la razón y sentir vergüenza de que algunas personas, que debieran estar plantando pinos en Rostro Gordo o dirigiendo el tráfico (es un decir) estén gobernando mi ciudad. Qué pensaran de Melilla en el resto de España, qué dirán de los melillenses cuando sepan que un año mas, las víctimas del terrorismo se quedan sin su reconocimiento.
Uno de los políticos que ocupaba la poltrona que se la arrebató a otro con los votos de la censura que aun colea por ahí algo de ello, dijo que el actual, que también se la ha arrebatado a otro, ¡qué guirigay!; pues bien, dijo que el actual le espetó en su despacho que allí se hacía lo que a el le salía de los cojones. No me digan ustedes que la frase no es una pura filosofía dicha con toda la democracia del mundo, ...¡ por los cojones ¡ (como dice aquél que dijo el actual).
Leo también que el actual presidente lamentó lo sucedido por lo que implica de “daño a la imagen de la ciudad”. Yo le digo que el daño ya esta hecho cuando no han tenido esa inflamación escrotal que dicen que dijo él al no retomar entre todos la situación y ser mas humildes y olvidarse de la soberbia política de partido.
Mi amigo, que es un semanasantero malagueño de toda la vida, me animó a hacer varias pancartas bien grandes para cuando vengan las autoridades y desfilen, presidiendo la procesión, ya que el Ayuntamiento de Melilla es Hermano Mayor Honorario de la Cofradía de la Virgen de la Misericordia figurando el escudo de la ciudad en la parte frontal del palio. En la pancarta se podría leer lo siguiente: “Señor Presidente y demás políticos viajeros (lo de viajero sería cachondeo) de la Ciudad Autónoma de Melilla: Cuándo van a conceder la medalla de oro de su ciudad a las víctimas del terrorismo”. Una de las pancartas la sostendrían dos personas a pies firmes escuchando el Himno Nacional en la calle Ancha del Carmen, a la salida del Paso o Trono. Otra pancarta estaría situada en la Alameda Principal, junto al puente de Tetuán, otra a la entrada de la calle de Larios, la siguiente frente a la tribuna oficial para que todas las autoridades le pregunten a los políticos melillenses; los que se salen de la procesión para sentarse en la tribuna, qué es eso de la medalla de oro que dice esa pancarta. No vean ustedes la vergüenza que pasaría; todo un representante de una de las ciudades que constantemente nuestro vecino cuestiona su propiedad y nuestra españolidad y que no se pongan de acuerdo para una cosa tan importante como es la concesión de la medalla de oro de la ciudad a las víctimas del terrorismo. Otra pancarta la colocaría en la Tribuna de los Pobres en la calle de Carretería, donde todas las cadenas de radios y televisiones trabajan mas a gusto porque de tribuna no tiene nada, solo es una escalerilla de mármol que va desde el puente de calle Mármoles a la de Carretería, donde por tradición en Málaga, se sienta la gente con sillas particulares a ver sus procesiones mas a gusto que en ninguna otra parte, y también donde La Legión, con su marcialidad, hace las delicias del público cantando y tocando su himno legionario.
Yo no conozco personalmente a ningún componente del gobierno de la Ciudad Autónoma, solo de oídas y alguno que otro de vista; jamás he hablado con ninguno pero estoy seguro que ninguno sentirá lo que en estos momentos siento yo, y es rabia y perplejidad.
Como ya digo anteriormente los melillenses que residimos en esta otra orilla tenemos que sortear con la política de nuestro “amable” vecino y la desinformación a que nos tienen acostumbrados los gobernantes nacionales de turno y muchos de los locales, estos con sus peleas barriobajeras como la actual y siendo el debate, que no debiera ser tal, uno de los mas importantes de toda la legislatura, al menos eso es lo que a mi me parece.
Para terminar yo propondría que tanto, consejeros, viceconsejeros, comisionados y gente que pulula por el palacio de Enrique Nieto, fueran amas de casas normales y corrientes las que dirigieran la ciudad. Son las únicas que saben mas de economía que nadie; que se lo pregunten cuando van al mercado; las mas batalladoras en defensa de algo suyo, y no como algunos-muchos varones que cuando pillan la poltrona se tiran a la bartola toda la legislatura. Se pelean y discuten en plan sainete, cosas que en cinco minutos estarían listas si fueran mas ágiles y se dejaran de portavocías y demás zarandajas. La limpieza de la ciudad ya no estaría en entredicho, que si la ciudad está muy guarra, que si tal consejero no vale un duro. No crean que es una utopía, aunque como está el entramado político, desgraciadamente, si lo es. Está comprobado que tanto empresas privadas como comunidades de vecinos donde son mujeres las que las presiden funcionan de maravilla y no me digan que las amas de casa no son capaces de dirigir una ciudad como Melilla. Estoy seguro que las hay preparadísimas y locas por hacer algo por sus calles y barrios que muchos hombres no lo harían. Creo que la ciudad ganaría y a los actuales que gobiernan que se vayan cada uno a sus trabajos respectivos, así tal cual, pero no a la puta calle, como le dijo el “zar” de Marbella a un periodista: tú, a la puta calle. Solo me conformo conque se vayan y dejen a las mujeres gobernar, pero, repito, que sean todas amas de casa.
Juan J. Aranda
Málaga 20 de Septiembre de 2001
Publicado en “Melilla Hoy” el 29 de Septiembre de 2001
En el año 1985, cuando los sucesos de la plaza de España, escribí unos poemas en unos momentos de indignación que mas bien me produjeron tristeza que otra cosa.
Creo que alguna similitud tienen con la actualidad y dicen asi:
“A LOS POLÍTICOS DE MELILLA”
“Melilla vieja y joven,
eres ciudad mal gobernada.
Tus políticos gandilocuentes no te informan.
Son buscadores del voto, mientras piensan,
¿son galgos o podencos.
Y ellos, ¿son liebres o conejos.
También tienes otros políticos;
Estos son de babuchas blancas,
Arribistas y de nuevo cuño.
Españoles descafeinados los llamo,
Y con consignas del Alauita
Y de Madrid benefactor,
Van caminando lento
Pero seguros de su fin.
Tus grandilocuentes políticos,
Mientras, se besan a dentelladas.
¿Son galgos o podencos
y ellos ¿son liebres o conejos.
A todos los melillenses de buena fe les envio un cordial saludo y a algunos gobernantes, dice mi amigo, que los zurzan (con todos los respetos hacia los cargos que desempeñan).
Juan Aranda
Málaga 19 de Septiembre 2001
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home